Árboles con alma


Mi abuelo, ilustre abogado y popular poeta costumbrista altoaragonés, publicó en 1935 una poesía en homenaje a los árboles dedicada a los niños. Se trataba de un poema sencillo, pedagógico, amable: a continuación transcribo la primera estrofa:

"La cuna en que nuestra madre / nos mece en la edad primera, / la lumbre de los hogares / de las risueñas aldeas, / el techo que nos cobija, / los muebles que nos rodean, / las flores que nos perfuman, / los frutos que nos sustentan, / los libros en que estudiamos / y el arca en que nos entierran; / son producto de los árboles / que véis crecer por doquiera" ...

Pues bien, el objeto de este blog es unirme a ese homenaje y dar a conocer los árboles ya que no con versos míos, con fotografías mías... Y con poemas acerca de los árboles de autores consagrados. Por cierto, el resto de la poesía de mi abuelo podéis leerlo en la entrada "Los árboles" de este blog.

martes, 22 de marzo de 2016

Ficus Rubiginosa. Higuera de Port Jackson

La "Higuera de Port Jackson" es un ficus de origen australiano que se ha utilizado mucho, por su notable belleza, en parques, jardines, plazas y calles en España; en particular en las zonas de la costa sur. Son famosos, por ejemplo los de Cádiz. Se trata de un árbol de hoja perenne de 10 ó 15 metros de altura, aunque puede llegar a los 30.


Una característica muy particular es su intensa generación de raíces aéreas. Así lo vemos en esta "higuera de Port Jackson" situada en el Jardín Botánico de Barcelona. La vista es mucha más espectacular desde otro ángulo: 


Nos acercamos a esas raíces que se han tornado troncos complementarios del inicial. Ciertamente es un aspecto notable. Fijaos, además en esas numerosas "fibras" que cuelgan de las ramas: son "raíces aéreas": las que lleguen a contactar con el suelo arraigarán en tierra y se convertirán en nuevos troncos, que engrosarán rápidamente y reforzarán el árbol y le aportarán más nutrientes...:


Ya hemos visto raíces aéreas de ese tipo en este blog; en concreto en la entrada referente al Ficus microcarpa, ó "laurel de la India". 

Aquí abajo tenemos el tronco de otro "rubiginosa", éste menos espectacular pero también muy clásico: tronco corto y grueso con una corteza gris, más bien clara...


El árbol de ese tronco está situado en el Jardín de Mossèn Costa i Llovera, precioso y famoso jardín ubicado en Miramar, en Barcelona. Como veréis son árboles de copa amplia, densa, oscura. En ese jardín le acompañan palmeras y plantas exóticas


Y aún otro gran ejemplar de ficus rubiginosa. Se encuentra en el parque de Torreblanca, parque que comparten 3 municipios: San Joan d'Espí, San Feliu de Llobregat y San Andreu de la Barca, del Área Metropolitana de Barcelona: 


Pues bien, se trata de un solo árbol, eso sí: muy extendido. Lo indica la simpática guía del parque que dice: "... el espectacular ficus que con sus múltiples e imponentes raíces de aferra a las rocas". Ciertamente el tronco original y las raíces aéreas convertidas en troncos crean una auténtica maraña en la que es difícil distinguir qué es cada cosa: 


Las hojas son ovaladas , pero tanto la base como el ápice son redondeados, no agudos. Miden entre 7 y 10 ó 12 centímetros de longitud y, hasta 5, de anchura.  El peciolo mide entre 1 y 2,5 centímetros. Aquí tenemos un conjunto de ellas del árbol de Torreblanca: 


 Las vemos más de cerca: son alternas; su textura es coriácea; su color verde oscuro por el haz y verde más claro y, a veces tendiendo al rojizo, por el envés


Y más hojas. Apreciamos también  las nuevas hojas protegidas por una vaina; y en el centro de la foto una pequeña esfera que luego será "sicono" ó higo y contendrá inflorescencias y frutos:


Pues aquí tenemos un"sicono" más hecho, pero aún verde:


Suelen aparecer por parejas opuestas; aquí vemos un par de siconos, en pareja, pero en distinto grado de maduración... al madurar pasan del verde inicial a un tono rojizo:


Y ahora unos cuantos siconos ya bastante maduros; pertenecen al árbol de Miramar:


Y otro grupo de siconos, casi maduros, también  de Miramar. Esos siconos incluyen en su interior las inflorescencias masculinas y femeninas. Mediante el ingreso en el sicono de una avispa específica se producirá la fecundación..., siguiendo su fruto dentro del sicono...


Tenemos ahora una nueva visión de la "Higuera de Port Jackson" del jardín de Montjuich. Por su perfecta arquitectura se ve que es un árbol mimado por los jardineros... 



Como decíamos, es especie muy estimada en las ciudades del sur peninsular: a destacar, por ejemplo, los ejemplares existentes delante del Hospital de la reina Sofia de Murcia.



jueves, 17 de marzo de 2016

Encina. Alzina. Ampliación

Esta "página" o "entrada" del blog es complementaria de la página principal referente a la encina, "quercus ilex". 
Incluimos ahora unas cuantas encinas que tienen un especial empaque o alguna circunstancia peculiar que las hace de particular interés.        Para volver a la entrada principal, clicad aquí: encina: clicad aquí


Hemos comprobado en la entrada del "alcornoque" la notable diferencia de las cortezas de encinas y alcornoques...; son especies de la misma familia, pero especies distintas; pues bien, hemos encontrado un árbol realmente peculiar, único en Catalunya y quizás en cualquier lugar: aquí tenéis la descripción que hace el Ayuntamiento:



Es una notable rareza botánica. Aquí vemos su tronco, su tronco "doble", que da lugar a dos especímenes de distintas especies juntos, como hermanos siameses... 











A la derecha, tenemos el árbol o ¿son dos árboles?...















                                                                                Y ahora vemos el conjunto del llamado "suroli" desde el lado opuesto al de antes...     Ciertamente es un conjunto bien original...                                                                              











Tras la peculiar y sorprendente encina-alcornoque del municipio de Sant Gregori, en Girona, "descubierta" en Julio de 2016, incluimos una encina romana, situada cerca de la Basílica de San Juan de Letrán.


A la izquierda habéis visto parte del "palacio" de Letrán. En concreto el "triclinium" que hizo preparar el Papa Leon III para homenajear a Carlomagno: lo coronó emperador en el año 800:

También la siguiente es romana: forma parte del conjunto de encinas que bordean el "Circo Máximo", delante del "Palatino":


Volvemos a España, en concreto a Llaés, en la comarca catalana del Ripollés. Ya sabéis que hay allí unos fastuosos bosques de encinas. Esta es una de las encinas que nos acompañan en el camino hacia esos bosques:


Aquí el tronco y primeras ramas de una de esas encinas: son encinas muy grandes: tienen un perímetro de entre tres y cinco metros a 1,30 metros del suelo.  Dato ciertamente muy notable


Esta encina de la foto de abajo está justo en frente de la "Vila de Llaés", mínima aldea que da nombre a la zona:


Y este es el tronco de la más respetable (ya la hemos visto en la entrada principal). A nivel del suelo su perímetro es de más de 9 metros; a 1,30 de altura, unos 5 metros...:


Otro estilo de encinas: "decorativas" de un precioso jardín del Vallès. Probablemente las encinas estarían ya allí cuando se urbanizó la zona.
    

Una de las encinas de ese jardín desde otra perspectiva:



Y otra encina, bien rústica, ésta: junto al margen de un campo de cereal apenas despuntado, un campo delimitado por el camino que conduce a Can Patxau, masía del Vallès de la que ya hemos hablado en otras entradas...
  

Y volvemos a Barcelona: una encina protegida, catalogada por el Ayuntamiento, plantada en 1894. Es una longeva encina a cuyos pies juegan a la petanca algunos abuelos... Está en el barrio de "Les Corts"
   

Ahora, una de las clásicas encinas de la Plaza de Cataluña. Son de 1904. Han cumplido pues más de 100 años...
                                     
                                                                                     
Y aquí abajo, otro conjunto de encinas de jardín: las que dan entrada al parque del TuróPark, de Barcelona. Delante, descansando un turista con su hijo:.


Y acabamos esta ampliación, por el momento, viendo más de cerca la encina próxima a la Basílica lateranense 



Para volver a la entrada principal de la encina, clicad aquí: encina: clicad aquí

sábado, 27 de febrero de 2016

Laurel de Indias. (Ficus microcarpa)

El Laurel de las Indias, también llamado "Ficus nítida" y "Ficus retusa" es un árbol "siempreverde", es decir, de hoja perenne, de notable desarrollo y amplia copa redondeada, muy utilizado como árbol urbano en multitud de ciudades de zonas templadas o cálidas. Estos están en la calle Torrevieja, de Barcelona, junto a la Villa Olímpica...:


Lo vemos ahora desde su derecha, junto con otros ejemplares de su alineación. Son árboles muy elegantes que pueden llegar a entre 18 y 25 metros de altura. Su amplia copa tiene un diámetro de unos 15 ó 20 metros, o más:


Este otro ficus microcarpa, más grande y más antiguo, está en el centro de la ciudad, como un poco perdido entre las calles de Entenza y del Marqués de Sentmenat; sorprende encontrar allí un árbol tan grande y bastante desconocido:





Vemos su perspec- tiva desde la calle Entenza, más o menos desde el Este 

Y esta es la visión desde el Norte. Se trata, en efecto de un gran árbol.





Este es el tronco de uno de los árboles de la calle Torrevieja



Los troncos son gruesos, rectos y se ramifican a poca altura. Su corteza es lisa y de color gris .



Y vemos abajo el notable tronco del árbol de Entenza:


Una características de estos ficus, como también de otras especies del "Genero Ficus" es generar "raíces aéreas", es decir: raíces que derivan de diversas parte de la planta, de las ramas, por ejemplo, y van creciendo hacia el suelo, donde pueden llegar a arraigar, constituyendo como un segundo tronco... En este ficus de la calle Rocafort de Barcelona observamos ese fenómeno: las nuevas raíces son esas como fibras que cuelgan del árbol. En este caso no llegan al suelo y, en consecuencia, no arraigan:


                                                                                                                                                               Ahora vemos con mucha más claridad cómo esas posibles nueva raíces son muy   numerosas                                                                                                                                           Y dan un aspecto bien sorprendente a nuestro árbol...

                                                                                                                                                                                                                                                                                                         Queda claro aquí, a la izquierda, que esas posibles futuras raíces nacen de las ramas...                                                             En las selvas tropicales  los troncos complemen-tarios derivados de esas raíces aereas, colaboran con el tronco principal y permiten que las ramas de esos árboles sean muy  largas (y pesadas), sosteniéndolas...; es decir que esos ficus pueden llegar a ser amplísimos...

Las hojas, muy numerosas (son árboles muy densos), miden entre 4 y 10 centímetros de longitud y entre 3 y 5 de anchura. Son algo coriáceas, verdes oscuras, lustrosas, por el haz y algo menos coloridas por el envés.


Son simples, alternas,. ovales o elípticas, con margen entero y ápice obtuso. 


Las nuevas hojas, amarillas viran poco a poco al verde oscuro...


Los "frutos" de las plantas del género "ficus", llamados "higos" ó "siconos" son, en realidad falsos frutos: son inflorescencias ubicadas dentro de unas cubiertas que las protegen: cubiertas que incluyen las flores masculinas y femeninas. En el caso del microcarpa, si se produce la fructificación, por asistencia de determinado insecto, el fruto que surge es un aquenio ovoideo con una sola semilla. 


Como hemos podido ver, los "siconos" del ficus microcarpa son pequeños: miden menos de 10 milímetros de diámetro; se sitúan en las axilas de las hojas; son "sésiles" -no tienen peciolo- y aparecen por parejas enfrentadas. Pasan del verde-amarillo de la anterior foto al púrpura, al madurar...

Comprobamos ahora la forma "piriforme" de esos higos y su color... Y su pequeño tamaño que justifica el apellido de "microcarpa"


  Ese color pasará al rojo oscuro, casi negro, al fin...


Acabamos viendo toda la calle Torrevieja, luciendo sus ficus. Arriba, a la izquierda podemos ver la torre de uno de los hoteles de la Villa Olímpica  de Barcelona. Son árboles de veloz crecimiento y que admiten bien las podas, por ello, son muy estimados por los Ayuntamientos de ciudades cálidas... 


No obstante, estos árboles tienen un par de problemas: sus raíces son muy agresivas: hay que asegurarse para que no rompan los pavimentos; además, los numerosísimos siconos caen continuamente... ensuciando las calles...


Otra peculiaridad, que no puedo mostrar fotograficamente, es que el microcarpa también puede desarrollarse como "árbol estrangulador", germinando su semilla en la copa de otro árbol, semilla que ha quedado allí portada por un ave, por ejemplo. Desde ahí, emite sus raíces, que deslizándose por el tronco del árbol anfitrión alcanzan el suelo. En ese momento comienzan a engrosar, llegando a estrangular al árbol que lo acogió... Por eso recibe nombres como matapalo o dendrocida.