Árboles con alma


Mi abuelo, ilustre abogado y popular poeta costumbrista altoaragonés, publicó en 1935 una poesía en homenaje a los árboles dedicada a los niños. Se trataba de un poema sencillo, pedagógico, amable: a continuación transcribo la primera estrofa:

"La cuna en que nuestra madre / nos mece en la edad primera, / la lumbre de los hogares / de las risueñas aldeas, / el techo que nos cobija, / los muebles que nos rodean, / las flores que nos perfuman, / los frutos que nos sustentan, / los libros en que estudiamos / y el arca en que nos entierran; / son producto de los árboles / que véis crecer por doquiera" ...

Pues bien, el objeto de este blog es unirme a ese homenaje y dar a conocer los árboles ya que no con versos míos, con fotografías mías... Y con poemas acerca de los árboles de autores consagrados. Por cierto, el resto de la poesía de mi abuelo podéis leerlo en la entrada "Los árboles" de este blog.

jueves, 21 de enero de 2016

Fresno de Pensilvania. (Fraxinus pennsylvanica)

Una de las más destacadas especies del género "fraxinus", es decir, de los fresnos. Árbol caducifolio de hasta 20 metros de altura, originario de Norteamérica. Su copa es ovoidal, de unos  8 ó 10 metros de anchura. Éstos se encuentran en la plaza de Gala Placidia, de Barcelona. 



                                                                          Este otro magnífico fresno está en el Antiguo Jardín Botánico de Barcelona. Se estima que fue plantado en torno a 1924, es decir, dentro de poco alcanzará los 100 años.                                                                                                                                                                                     Para haceros una idea de su tamaño, fijaros en la persona que está un poco por delante de él...
Esta es la copa de ese gran fresno. Sucede que conforme pasan los años, la copa tiende a aclararse: se hace abierta y muy ligera, como aquí vemos:




Pues este es el tronco de este gran fresno.


Como podéis comprobar, es tronco recto, columnar, recio. 


Su corteza se presenta muy fisurada. Es de color gris, más o menos oscuro; a veces, con tintes marronáceos.



Y, a la derecha, el tronco de uno de los árboles de la plaza de Gala Placidia.


Tronco también recio pero que necesita un "apoyo externo" (ignoro el motivo). 


Veis que es gris, algo más oscuro que el anterior.



Son árboles de 1933, es decir, también muy añosos.

Las hojas de estos fresnos son pinnadas, compuestas por 7 ó 9 folíolos. Miden en torno a 25 centímetros de lado; cada folíolo, unos 10 o 12 centímetros.  Aquí están:



Los folíolos son de un color verde ni claro ni oscuro: intermedio. 



Los folíolos se van estrechando progresivamente hacia el ápice. Son algo más grandes que los de los fresnos europeos; y es más acusado su ápice, su "punta"


                                                                                                                                                                        De todos modos, su aspecto es el habitual de los fresnos, con sus parejas de folíolos enfrentados y uno terminal.
Aquí vemos una de esas hojas con 7 folíolos bien iluminada por el sol


Volvemos a los fresnos de la plaza de Gala Placidia: casi todos necesitados de apoyo.


                                                                                                              Y al fresno del viejo parque barcelonés, más antiguo, pero autosu- ficiente..

Y su tronco, más de cerca:




3 comentarios:

  1. ¡Qué magnífico porte! Me encanta ese árbol casi centenario del Jardín Botánico, hace mucho que no voy por allí, cuando vaya seguro que me acordaré.
    Un abrazo.

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  2. Yo sé reconocer el fresno sólo cuando brota, porque tiene yemas negras, ¿cierto? ¿Cómo reconocerlo el resto del año?

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