Abedul. Bedoll. (Betula péndula)

El abedul es un árbol de hoja caduca que crece con rápidez. Llega a medir hasta 20 ó 25 metros. Es un arbol que ama la luz. Se instala en los claros de los bosques, en las "erolas"







Aqui tenéis dos ejemplares.
Ambos situados en Queralbs. Al pie del primero está Federico: véis que el abedul es un árbol de gran porte.

Este de la derecha está en el propio pueblo de Queralbs

El tronco es airoso con la corteza lisa y blanca: esa es una de las señales que os ayudarán a distinguirlo. Suele tener grietas oscuras, sobre todo en su zona inferior.       

También son muy características sus ramas, colgantes en su juventud. Y las hojas: triangulares o romboidales, con punta aguda...

Y os presento ahora otros abedules, situados en Plà de Prats, en Campelles. Plà de Prats es una magnífica area de acampada situada en la falda de la sierra de Mogrony, a pocos kilómetres del pueblo de Campelles, en la Vall de Ribes. La vegetación es de gran belleza: los pinares de pino rojo, los abetares -las avetosas-, estos abedules... Está situada a 1570 metros. Aquí están:

Con sus clásicos troncos, que ya conocemos: esbeltos, blancos, con láminas que se van desprendiendo:

   Y sus características hojas:

Y este es el citado refugio de Plà de Prats; un sitio magnífico como se puede ver...

Más abedules: éstos del precioso jardín de una fábrica situada en Ribes de Freser

Nos acercamos a uno de ellos,

Son árboles "monoicos" con flores masculinas y femeninas en el mismo "pie", en el mismo ejemplar. Flores que se instalan en "inflorescencias"; aquí veis las masculinas... 

y, ahora, otras inflorescencias masculinas, más de cerca. Ese tipo de inflorescencias, colgantes, se llaman "amentos"

Y así son las inflorescencias femeninas, más cortas y anchas, también "pendulas", colgantes.

Esas inflorescencias darán lugar a las infrutescencias en las que se reunirán los frutos.

El abedul es un árbol europeo. Sobre todo del Norte de Europa. En la taiga noruega, por ejemplo, hay pobladísimos bosques de abedules... Este no está allí sino en Baviera.

Por fin, unos abedules de los Alpes, cerca de Insbruck 

Acabamos transcribiendo la primera estrofa de un poema al abedul que nos remite Sergio Fernández Salvador, ilustre poeta leonés…:

¿Y qué ambición más limpia,

mejor dotado premio que merecer cantarte,

cenizoso abedul que entre dos prisas

te cruzas en mi día?

¿No es suficiente pago el rumoroso

tintineo de las monedas de oro

que aún tiemblan en tus ramas

cuando están ya desnudos

los castaños, los álamos, los plátanos?

Para leer el resto del poema podéis clicar aquí.